lunes, 29 de junio de 2015

¿Por qué hurtaba?

¿Por qué hurtaba?

Hemos dejado las relaciones sociales por el dinero, en nuestra sociedad. Se deja de saludar a alguien por las prisas para ir a comprar. Se está solo en la guagua(autobús) y en los coches para ir a estudiar y/o trabajar a la ciudad. Esa falta de amigos y amigas la queremos sustituir por comida, bebida, placer sexual y demás...

Yo, cuando hablo con la gente a la que quiero, dejo de tener ganas de comer en demasía. ¿Qué tiene que ver esto con hurtar? Que el poseer objetos y comer en demasía se parecen mucho. Es la falta de amor, repito, la que hace que compremos cosas que no nos hacen falta. Yo soy así. A veces compro cosas por si acaso. Y después, ya no recuerdo ni donde las dejé, ni si las tenía. A veces, saco los cajones y miro dentro, encuentro una cosa olvidada, y pienso, ¡chacho, yo tenía esto!

Todo esto viene a cuento de que hay personas que hurtan cosas porque no se sienten queridas. Es triste, pero sucede. Y la forma de vivir en las ciudades te aleja de las amistades. O sea, que tenemos mucha gente que se metería un bolígrafo en el bolsillo en unos grandes almacenes. Un bolígrafo que no ha pagado previamente, digo. Eso es malo. Eso te encadena. El pecado encadena.

Esta tarde fui a los grandes almacenes y decía en voz baja "¡soy libre!" porque no me daba el impulso de hurtar nada. Compraba y miraba cosas. Así llevo más de veinte años. Sin hurtar en ninguna tienda, gran almacén o kiosko. Con los consejos de la gente que me quiere y las medicinas me he ido curando.

Pero más los consejos, porque te puedes tomar la pastilla que te regula la química cerebral, que si es habitual la conducta de hurtar, sigues con el rollo un tiempo.

El acto de hurtar te puede enganchar como la droga. Crea adicción. Yo dejé de hacerlo dos años y medio después de medicarme y de abrirme a la gente. Porque entre que la gente, muchos, por esto, te rechazan y tú que te cierras, te quedas solo.
Solo.

Y rechazas a la gente que te quiere, cuando tienes esta clase de problemas. Porque nunca estarás solo en el mundo.

Pablo Manuel

martes, 9 de junio de 2015

Hurto y sexualidad

Según dicen algunos psicólogos todo tiene una motivación inconsciente. Hurtar cosas por ejemplo en un bolso es la actitud de querer penetrar un órgano sexual femenino. 
Hurtar una cartera tiene que ver con el órgano sexual masculino y viene a ser querer tener un miembro viril para uno.
Y es verdad, ¡eh! Somos seres sexuales, desde la adolescencia queremos hacer esas cosas, tener sexo para procrear con otra persona.

martes, 2 de junio de 2015

¿Qué es la cleptomanía?

En mi modesta opinión, no soy psicólogo, ni psiquiatra, solo alguien que sabe y quiere ayudar, es una conducta adictiva que genera culpa y rechazo social. La conducta consiste en coger cosas que no son tuyas para dejar de sentirte mal. Es un trastorno del control de los impulsos según la psicología, como la piromanía(pegar fuego a cosas), la tricotilomanía(halarse el pelo sin darse cuenta) o la ludopatía(jugar sin medida).

Según creen los/as psicólogos/as, es porque tienes una falta de cariño desde la infancia, que intentas sentirte mejor cometiendo el hurto. Algunos psicólogos/as de la rama del Psicoanálisis creen que está relacionado con la sexualidad, con la idea de hacer el acto sexual. Esto lo hablaremos otro día.

Vídeo con caso ficticio


Aquí se representa un caso de cleptomanía. Con la ayuda de un amigo, encontró un camino en el cual sanarse. También con ayuda médica, pues los galenos, los médicos, han comprobado que en el cerebro de las personas trastornadas por cleptomanía hay una descompensación química que las pastillas intentan equilibrar. En mi opinión, hace más los consejos de un amigo, que las pastillas.

Presentación y razón del blog

¡Hola, amigos y amigas! He creado este espacio para acompañar a las personas que padecen cleptomanía. Que, sin saber bien por qué, van a un sitio donde hay cosas expuestas y se las apropian. Aquí encontrarán ayuda para salir de esa conducta adictiva y perjudicial.

 Cuando has hurtado muchas veces se crea una salida a tus problemas y malestares que dá ganas de utilizar. Pero, con la ayuda de tus amigos y familiares se puede resistir las tentaciones y cambiar tu forma de entender el mundo. Y ver que hay un hueco para tí en éste.

También con ayuda psicológica de personas que sepan como funciona la mente. Psicólogos/as, sacerdotes, personas sabias...que te pueden ayudar mucho con sus orientaciones sobre la vida.

Y también con ayuda psiquiátrica, pues se ha comprobado que las personas que tienen cleptomanía su cerebro tiene una descompensación que las pastillas intentan equilibrar con la química de estas.

Les quiero decir que, para mí, hacen más los consejos de la gente que te quiere que las pastillas, es una opinión personal. Eres como una oveja descarriada que tiene el pastor que traerla el camino de nuevo. Y eso no lo hace la química, claro.

Bueno, explicado el motivo del blog, seguimos pa' lante... :)

Saludos cordiales.


Pablo Manuel